Especialidades

El odontólogo lo atiende en su casa

Ahí está el comedor, la sala y ahí, entre los dos, la silla odontológica. Más allá queda la cocina y el baño auxiliar… 

¿Silla odontológica? No, no se trata de parte de la decoración, ni es una excentricidad del dueño de casa, sino de un nuevo servicio que ya se encuentra en la ciudad: odontología a domicilio. 

«La idea nació cuando me encontraba atendiendo, con las herramientas que tenía, a una persona mayor que no podía moverse de su casa, y de mis misiones médicas en Urabá», cuenta el odontólogo Gabriel Jaime Velásquez.

 

Él, junto con su colega Guillermo González le dieron vida a Oralhome. 

Juntos desarrollaron la idea, se dieron la pelea por una base jurídica para ofrecer lo que ahora tienen. 

También se ingeniaron la forma de llevar hasta la casa de sus pacientes la tradicional y necesaria silla para realizar los procedimientos.

 

En esencia, explican, es la misma que se ve en un consultorio, con la lámpara, el láser y todas las herramientas necesarias. 

¿Cuáles tratamientos realizan a domicilio? «De todo, menos cirugía, al menos no en la casa, eso se hace en la clínica», explica González: diseño de sonrisa, blanqueamiento, revisiones, coronas, ortodoncia y periodoncia. 

Los otros procedimientos, de mayor envergadura se realizan en la clínica. 

En cada unidad móvil, de las tres que tienen, viaja un odontólogo y un auxiliar de odontología, que son los encargados de armar la silla en el hogar de los pacientes. 

En un computador portátil, además, llevan la historia clínica de cada persona. 

«Tenemos un control estricto en el tema de bioseguridad y disposición de los residuos», advierte González. 

Para todo el mundo
Hace un par de días llegaron los odontólogos de Oralhome a Robledo. 

«Atendíamos a una señora de 95 años y su hija se asombró al ver todo con lo que llegamos allá y llamó a sus hermanos y de un momento a otro todo el barrio estaba pendiente del servicio», relatan los creadores de esta empresa de salud. 

Para desarrollar su empresa, pensaron en las personas con movilidad reducida, los niños con síndrome de down, los ancianos, pero también en quienes no disponen de tiempo por su trabajo, por ejemplo. 

«Esos ejecutivos que no tienen ni un segundo para nada, en una ciudad con problemas de movilidad, con pico y placa dos veces a la semana, ellos también pueden ser nuestros clientes», asegura González. 

Es una atención, además, prestada con toda la tecnología del caso y que incluye, también, una cámara de video que le permite al paciente ver cómo se realiza el procedimiento. 

«La idea que tenemos es brindar comodidad y calidad a las personas que busquen el servicio», concluye Velásquez.

Publicado en elcolombiano.com 3 de sep de 2008

Author


Avatar